Haciéndonos eco de las palabras de nuestro fundador, San Arnoldo Janssen quien dijo: «Rogué al Espíritu Santo quiera iluminarlos y fortalecerlos a todos ustedes y unirlos con el vínculo del amor, así como Él responde a la voluntad del eterno Padre de amor”, queremos renovar nuestra vida y nuestra misión.

Durante este año 2021 teniendo en cuenta la grave situación económica, social, educativa, sanitaria y religiosa; nos propusimos durante 7 días reflexionar sobre los dones del Espíritu Santo: Sabiduría, Inteligencia, Consejo, Fortaleza, Ciencia, Piedad, Temor de Dios.

Lo hacemos convencidos porque, sin el Espíritu Santo, el Evangelio es letra muerta, la Iglesia es pura organización, la misión pura propaganda, el culto mero recuerdo.

Hoy más que nunca nuestra Patria necesita un nuevo Pentecostés.

 El Espíritu Santo nos hace empezar algo nuevo, algo que comienza desde la novedad de nosotros mismos, pues nos hace nuevos en Cristo.

 Pidamos hoy los dones del Espíritu Santo no solo para cada uno de nosotros, sino para cada familia de nuestra Patria, para nuestros gobernantes, agentes de la salud, educadores, para nuestros niños, adolescentes y jóvenes, para nuestros adultos mayores, para nuestros enfermos.

 Solo el Espíritu Santo puede iluminarnos en esta crisis y con su luz identificar soluciones dignas, justas y misericordiosas.

¡Feliz Pentecostés!